Durante el mediodía del lunes 6 de septiembre se escuchó la sirena de bomberos. El motivo era un pedido de auxilio dado que en la localidad de Ostende (calles Devillard y Rawson) se inició un incendio estructural que afectó a tres departamentos. De acuerdo a las palabras del oficial auxiliar de escuadra Mariano Bandi, cinco fueron las dotaciones que intervinieron. Con toda la capacitación previa aplicada en el siniestro, destaca que cada salida no deja de ser un riego pero, que al contar con adiestramiento, la labor voluntaria puede tener buenos resultados, pese a lo comprometidos que son ciertos incidentes a los que deben acudir.